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Foto del escritorLourdes Pinto & Fr. Jordi Rivero

Virtud de la Pobreza – IV


Diario de una MDC 30/enero/18. Misión de los 12". Cf. Mateo 10: 1-24.

Pequeña mía, te he elegido para dar fruto para el Reino de Dios en la tierra. La misión no es fácil, porque los caminos de Dios nunca son los caminos del mundo. Todos los elegidos por Dios para cumplir Su plan en la tierra son odiados por algunos, rechazados por otros, maltratados, perseguidos, porque vine a la tierra para enfrentar a unos contra otros, porque los caminos de Dios nunca serán aceptados ni apreciados por aquellos que viven para las cosas de este mundo. Dios te ha pedido que le traigas almas víctimas. Un alma víctima debe fijar sus ojos en Cristo, debe desear con todo su ser hacerse uno con su Maestro, debe estar dispuesta a aprender de Él e imitarlo. Debe estar dispuesta a luchar contra todos sus deseos desordenados. Esto requiere ciertas disciplinas para mis discípulos:

1) “No os procuréis oro, ni plata, ni monedas en vuestras fajas": Desapegados de las riquezas de este mundo, confiando en que Dios proveerá.

2) “Ni alforja para el camino”: Mis discípulos deben permitir que Mi espíritu los separe de todos los apegos desordenados (mi Señor, ¿cómo sabemos lo que es un apego desordenado?) Cualquier cosa que debilite tu deseo por Mí, que te distraiga de amarme, que aparte tu mirada de Mí.

3) “Ni dos túnicas”: Mis discípulos deben vivir con sencillez, pobres, nunca con excesos, como lo hice Yo.

4) “Ni sandalias”: Una vida dedicada al amor sacrificial, la penitencia, la renuncia.

5) “Ni bastón”: Mis discípulos se apoyan en Mí; Me convierto en su apoyo; Yo los guío.

Mis discípulos llevan Mi yugo, el madero de la Cruz, unidos a Mí. Yo soy su Todo. Mis discípulos son hombres y mujeres consumidos en amor y deseo por Mí. Eligen vivir esta forma de vida por amor a Mí y por el deseo ardiente de hacerse perfectos, que es convertirse en Amor. Solo de esta manera Mis discípulos reflejarán el rostro y la luz de Dios en el mundo. Estas son mis almas víctimas que poseen el poder de Dios en la tierra.

≈Padre Raniero Cantalamessa, POBREZA

El Antiguo Testamento nos presenta a un Dios que está abierto “a los pobres”, mientras que el Nuevo Testamento nos muestra un Dios que Él mismo se hace pobre. Solo el evangelio nos habla de Dios que se hace uno de ellos, eligiendo para sí la debilidad y la pobreza: “Aunque era rico, Jesucristo se hizo pobre por vosotros” (2 Corintios 8,9).

Los dos componentes esenciales del ideal de la pobreza bíblica ahora quedan claros: ser “para los pobres” y “ser pobre”. Juan Pablo II combinó ambos aspectos en su catequesis sobre la pobreza: “La Iglesia siente cada vez con más fuerza el impulso del Espíritu de ser pobre entre los pobres, para recordar a todos la necesidad de conformarse al ideal de pobreza predicado y practicado por Cristo, e imitarlo en su amor sincero y activo por los pobres”. (p.27)

Pobreza en la Vida de Cristo (p.36)

- “Jesucristo, siendo rico, se hizo pobre por vosotros para enriqueceros con su pobreza.” (2 Cor 8,9)

- Sto. Tomás comenta: “Soportó la pobreza material para darnos riquezas espirituales”. La pobreza de Cristo es un aspecto de su auto-abajamiento en la Encarnación.

- “A aquel que no conoció el pecado, Dios lo identificó con el pecado en favor nuestro, a fin de que nosotros seamos justificados por él.” (2 Cor 5,21)

- Beata Ángela Foligno explica las tres clases de pobreza de Cristo.

“La pobreza de Cristo fue de tres clases: Cristo, el camino, guía de nuestras almas, ejemplificó el primer grado de la más perfecta pobreza al elegir vivir pobremente y ser pobre, despojado de todas las posesiones terrenales. No guardó nada para sí mismo: ninguna casa, viñedo, monedas, dinero, propiedad, vajilla o cualquier otra posesión. No aceptó ningún bien terrenal, ni quiso aceptar nada más que una vida de extrema necesidad corporal, con escasez, hambre, sed, frío, trabajo duro, austeridad y penuria ... El segundo grado de pobreza, mayor que el primero, fue que Él deseaba ser pobre con respecto a los parientes, amigos y todos los afectos terrenales ... El tercer y supremo grado de pobreza fue que Cristo se despojó de sí mismo, se hizo pobre con respecto a su propio poder, sabiduría y gloria”.

- Por tanto, Jesús era pobre en cosas, pobre en apoyos y pobre en prestigio.

La historia de Santa Ángela de Foligno:

Algunos santos muestran señales de santidad muy temprano. ¡Ángela no! Nacida en una familia destacada de Foligno, Italia, ella se entregó a la búsqueda de riqueza y posición social. Como esposa y madre, continuó con esta vida disipada.

Alrededor de sus 40 años, reconoció el vacío de su vida y buscó la ayuda de Dios en el sacramento de la Penitencia. Su confesor franciscano la ayudó a buscar el perdón de Dios por su vida pasada y a dedicarse a la oración y las obras de caridad.

Poco después de su conversión, su esposo e hijos murieron. Vendiendo la mayoría de sus posesiones, ingresó a la Orden Franciscana Seglar. Se dedicó tanto a la meditación de Cristo crucificado como a servir a los pobres de Foligno como enfermera y mendiga por sus necesidades. Otras mujeres se le unieron y se formó una comunidad religiosa.

Diario de una MDC, “Misión de los 12” (Mt 10,1-24)

Un alma víctima debe fijar sus ojos en Cristo, debe desear con todo su ser hacerse uno con su Maestro, debe estar dispuesta a aprender de Él e imitarlo. Debe estar dispuesta a luchar contra todos sus deseos desordenados. Esto requiere ciertas disciplinas para mis discípulos:

· 63. La Purificación de Tus Deseos —Diario de una MDC.

La purificación de tus deseos es la primera etapa de purificación en Mi Sagrado Corazón. Comienzas a actuar solo de acuerdo a Mis deseos y no los tuyos. Ya no haces lo que quieres hacer, ni vas a donde quieres ir, sino que ahora solo vas a donde Yo te llevo. Eliges vivir cada día según lo que es más difícil, y no lo que es más fácil. Esto requerirá una mayor disciplina de tu voluntad, un mayor silencio y quietud del alma en Mí.

· Hebreos 12,10-11 “Porque aquellos (nuestros padres) nos educaban para breve tiempo, según sus luces; Dios, en cambio, para nuestro bien, para que participemos de su santidad. Ninguna corrección resulta agradable, en el momento, sino que duele; pero luego produce fruto apacible de justicia a los ejercitados en ella.”

Diario de una MDC 30/enero/18. Misión de los 12". Cf. Mateo 10: 1-24

1) “No os procuréis oro, ni plata, ni monedas en vuestras fajas": Esto significa: Desapegados de las riquezas de este mundo, confiando en que Dios proveerá.

2) “Ni alforja para el camino”: esto significa: Mis discípulos deben permitir que Mi espíritu los separe de todos los apegos desordenados (mi Señor, ¿cómo sabemos lo que es un apego desordenado?) Cualquier cosa que debilite tu deseo por Mí, que te distraiga de amarme, que aparte tu mirada de Mí.

3) “Ni dos túnicas”: Mis discípulos deben vivir con sencillez, pobres, nunca con excesos.

· 13/12/11, Sencillez

La llamada a la sencillez es la llamada al desapego de los apegos de la carne, tanto exteriores como interiores. A medida que creces en la sencillez, eres vaciada de todos los apegos que te impiden llenarte de Mi vida, Mi Sangre. A medida que te apartas de las cosas materiales, creces en la virtud de la pobreza. A medida que te vuelves pobre en las cosas del mundo, te haces rica en las cosas del cielo. Los pobres de espíritu son ricos espiritualmente y obtienen así la verdadera felicidad en la tierra. Por eso ves que la táctica de Satanás es hacerte desear la riqueza en las cosas del mundo.

Pero el espíritu de pobreza es mucho mayor que la pobreza física. Es desapegarse de tus propias ideas, deseos, planes, sueños, metas ... Es un completo abandono a Mí, tu Dios y Salvador. Esto requiere gran diligencia y abandono a Mi Espíritu. Deseo la sencillez de la inocencia de un niño con su madre. Es grato al Padre y al Hijo que pongas toda tu confianza en Nosotros.

4) “Ni sandalias”: Una vida dedicada al amor sacrificial, la penitencia, la renuncia.

La rosa de oro de la Rosa Mística – penitencia – aceptación de las pequeñas cruces diarias – también el hacer nuestro trabajo en espíritu de penitencia.

5) “Ni bastón”: Mis discípulos se apoyan en Mí; Me convierto en su apoyo; Yo los guío.

Padre Raniero Cantalamessa, POBREZA

El tercer tipo de pobreza es el más profundo de todos porque va más allá del nivel de las posesiones y toca la esfera del ser. (p.37)

En Cristo, la pobreza resplandece en su forma más sublime: no en el hecho de ser pobre (que puede ser un estado impuesto o heredado), sino en el hacerse pobre, y hacerlo por amor, para enriquecer a los demás. (p.38)

o “Ahora me regocijo en mis sufrimientos por vosotros, y en mi carne completo lo que falta a las aflicciones de Cristo por su cuerpo, es decir, la iglesia” (Col 1, 24).

o "¿Serás mi alma víctima?" elección voluntaria.

El malentendido surge de atribuir un valor excesivo a las manifestaciones materiales externas de la pobreza. Juan el Bautista era mucho más rígido en términos de ascetismo que Jesús. Jesús nunca cayó en la trampa en la que luego cayeron algunos de sus imitadores, de hacer absoluta la pobreza material, utilizarla como medida de perfección y acabar siendo ricos en lo peor que hay: en sí mismos y en la propia justicia. (p.39)

Razones por la pobreza de Cristo; por qué se hizo pobre: p.40-41

1. “Y puesto que, en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios por el camino de la sabiduría, quiso Dios valerse de la necedad de la predicación para salvar a los que creen.” (1 Co 1,21)

En otras palabras: dado que el mundo no reconoció ni honró a Dios cuando se reveló a través de la creación, en esplendor, poder, sabiduría y riqueza, ahora ha decidido salvar a la humanidad caída por los medios opuestos: a través de la pobreza, la debilidad, la humildad y la necedad. Ha decidido revelarse "bajo la apariencia de su opuesto" para desafiar el orgullo y la sabiduría humanos.

- "Pues el mensaje de la cruz es necedad para los que se pierden; pero para los que se salvan, para nosotros, es fuerza de Dios". (1 Corintios 1,18)

- “Pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos piedra de tropiezo, y para los gentiles locura” (1 Cor. 1,23)

- “Se hizo pobre por vosotros, para que con su pobreza vosotros os enriquezcáis” (2 Cor 8, 9).

- Un regalo es más precioso cuando es el resultado de la abnegación, cuando el dador se priva a sí mismo de lo que da. Y el Verbo, en cierto sentido, se privó de Su divina riqueza para compartirla con nosotros. La pobreza de Dios es una expresión de Su ágape, del hecho de que Él es amor. “Cristo nos amó y se entregó a sí mismo por nosotros” (Efesios 5,2).

2. La segunda motivación para la pobreza es la misión o Apostólica.

“No llevéis nada para el camino, ni báculo, ni alforja, ni pan, ni dinero, ni siquiera una túnica de sobra” (Lc 9, 3). La enseñanza de Cristo contiene dos niveles o formas diferentes de pobreza: uno requerido de todos para entrar en el Reino, el otro requerido de unos pocos en particular para anunciar el Reino. Esta segunda y más radical exigencia que Jesús la hace a los que llama a participar en su obra de anunciar el Reino y dedicarse totalmente a su causa: los apóstoles, ese pequeño grupo de discípulos que le seguían. (P 47)

o Pequeña mía, te he elegido para dar fruto para el Reino de Dios en la tierra. La misión no es fácil, porque los caminos de Dios nunca son los caminos del mundo.. Dios te ha pedido que le traigas almas víctimas (30/1/18), Misión de los 12).

o Respondan sufriendo todo conmigo en Mi sacrificio de amor. Respondan con valor y celo, creyendo que Dios los ha elegido para participar en el triunfo de Mi amor crucificado para salvar al mundo… 6/8/17

o 11/enero/18

Mi pequeña, estás preparando el camino para Mi Segunda Venida. Son Mis mártires ocultos del amor crucificado, por Mí, Conmigo y en Mí, quienes marcarán el comienzo del reinado de Mi Reino en la tierra.

ESPÍRITU SANTO: Padre Raniero Cantalamessa, POBREZA p.30-31

Solo en el Espíritu Santo podemos vivir esta nueva ley de hacernos pobres que nos presenta Jesucristo. Juan Pablo II escribió:

“Toda la obra de renovación de la Iglesia, que el Vaticano II propuso e inició tan providencialmente, solo puede realizarse en el Espíritu Santo, es decir, con la ayuda de Su luz y Su energía”. P.30

¿En qué radica la diferencia entre la renovación "en la ley" y la renovación "en el Espíritu"? La ley positiva, al ser externa a los seres humanos, no cambia el estado de sus corazones. En una palabra, no “da vida”. Empuja a una persona a hacer o evitar algo mediante coacción, bajo amenaza de castigo o culpa. Se basa en el miedo.

La ley interior, en cambio, que es el mismo Espíritu Santo (Rom 8, 2), cambia el corazón. No solo te ordena hacer algo, sino que te ayuda a hacerlo. Crea ese corazón nuevo que voluntariamente hace las cosas que Dios manda porque ama a Dios y confía en él. Se basa en el amor y mueve a la persona a actuar por atracción.

El Espíritu Santo puede renovar el ideal evangélico de pobreza en la Iglesia, infundiendo el amor por la pobreza. Más precisamente: infundiendo el amor de Cristo por la pobreza.

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